TRES NUEVOS SACERDOTES PARA NUESTRA DIÓCESIS DE ALMERÍA

 El pasado día 12 de octubre, fiesta de la Virgen de El Pilar, el Sr. Obispo, Dr. D. Adolfo González Montes, ordenó de presbíteros a tres diáconos que acaban de completar su preparación en nuestro Seminario Conciliar de san Indalecio y sus estudios en el Centro Superior de Estudios Eclesíasticos. Es una alegría para toda la diócesis y en especial para sus familias, formadores y profesores así como para el Obispo diocesano.

 

Los tres nuevos sacerdotes de la diócesis almeriense celebraron las primeras misas en sus parroquias de origen. Tanto en la S.A.I.Catedral de la Encarnación donde fueron ordenados como en sus respectivas parroquias la asistencia ha sido masiva y el clima de alegría y acción de gracias han sido una constante en estos encuentros de oración y celebración.

 

El primero en hacerlo fue D. Francisco J. Parrilla Fernández el viernes 14 de octubre en su querido pueblo de Serón. Toda la comunidad se volcó para compartir la alegría de este nuevo sacerdote. Al día siguiente, sábado 15, era el turno D. Antonio M. García Martínez en su pueblo natal, Zújar (Granada) a la que no faltaron, juntos el Seminario y sus compañeros, algunos sacerdotes de la vecina diócesis accitana. Por último, D. Samuel Olvera Olivares, celebraba su primera misa el domingo 16 en la parroquia de san Isidro de El Ejido. Como en los casos anteriores, parte del presbiterio diocesano, el Seminario Mayor y Menor y autoridades locales, quisieron estar presentes.

 

El Rvdo. D. Franscisco Parrilla Fernández ha sido destinado por el Sr. Obispo como Prefecto de Formación de nuestro Seminario Menor de la Inmaculada. El Rvdo. D. Antonio M. García Martínez ha sido nombrado párroco de la parroquia de la Anunciación del Señor de Fiñana y la Anunciación del Señor de Abrucena y Administrador parroquial de la parroquia de la Purísima Concepción de Escúllar; de la Anunciación, de Ocaña; y de la Anunciación, de Doña María. El Rvdo. Sr. D. D. Samuel Olvera Olivares ha sido enviado a completar estudios en Roma.

 

Nuestra Parroquia se alegra con la llegada al presbiterio diocesano de tres nuevos sacerdotes en momentos que son tan necesarios para la buena atención de nuestras comunidades. Es, también, un aldabonazo para nuestra parroquia que desde su erección canónica jamás ha tenido una sola vocación asunto que cuestiona grandemente nuestra vida espiritual y acción pastoral. Pidamos al Señor de la mies que envíe operarios y si escuchamos su voz seamos valientes y digamos aquí estoy. La familia, sin duda, es el primer semillero de vocaciones y cuando en su seno no se favorecen y suscitan también surge el interrogante de si nuestras familias son en verdad cristianas.